Actualidad del Observatorio Español de la Economía Social

05/05/2022

FOROESGAL presenta el primer Estudio sobre el Impacto Socioeconómico de los Principios y Valores de la Economía Social Gallega

La economía social contribuye al crecimiento inclusivo y a la reducción de las desigualdades, presentando mayor estabilidad laboral, mayores niveles salariales y menor dispersión salarial. Así se desprende del primer Estudio sobre el Impacto Socioeconómico de los Principios y Valores de la Economía Social Gallega, encargado por ForoEsGal, con el apoyo de Cajamar, CaixaRural Galega y la Consejería de Empleo e Igualdad de la Xunta de Galicia. Sus conclusiones fueron presentadas el pasado 4 de mayo en Santiago por sus tres autoras: Belén Castro y Rosa Santero, profesoras de la Universidad Rey Juan Carlos, y Maribel Martínez, directora de Abay Analistas Económicos.

El informe pone de manifiesto que la economía social tiene un peso significativo en el tejido empresarial gallego, ya que 5 de cada 100 empresas o entidades del sector privado pertenecen a él. Por provincias, A Coruña lidera la clasificación con el 43,9% de las entidades, seguida de Pontevedra, con un 35,5% adicional, alcanzando entre las dos el 80% de este tipo de entidades. Lugo representa el 11,2% de las entidades y Ourense el 10,7%.

La Economía Social gallega tiene una fuerte especialización en servicios sociales, donde el peso relativo de este sector en la economía social es 12 veces superior al de la economía mercantil. Y, aunque en menor medida, su implantación también es importante en sectores como Cultura y Ocio, Educación y Sanidad.

Las comunidades forestales son el tipo de entidad más numeroso (alrededor del 40 % del total), seguidas de las asociaciones y fundaciones (20,1 %), las cooperativas (18,0 %) y las Sociedades Agrarias de Transformación (14,6 %). Sin embargo, en términos de empleo, las asociaciones y fundaciones aglutinarían más de un tercio del total (35,5%), seguidas de las cooperativas (20,2%) y las cofradías de pescadores (17,5%).

Un comportamiento diferente

El estudio ahonda también en que las empresas o entidades de la economía social gallega se comportan de forma diferente a las mercantiles, lo que se traduce en una “aportación muy positiva para el conjunto de la sociedad, gracias a sus efectos sobre la cohesión social, la cohesión territorial y la creación de empleo inclusivo”.

En el ámbito laboral tienen un menor porcentaje de trabajadores a tiempo parcial (26,7% frente al 35,5% en las empresas comerciales). Además, genera actividad, empleo y prestación de servicios clave en el medio rural, porque este tipo de empresas se ubican, en su mayoría, en municipios de menos de 40.000 habitantes.

Como colofón, el informe señala que los beneficios netos totales (directos e indirectos) que los principios de la economía social gallega aportan a la sociedad ascienden a 851,2 millones de euros anuales. De este importe total, el 43% está vinculado a la creación de oferta en dependencia y educación, el 24,4% a las mejores condiciones de empleo y el 21% a la creación de puestos de trabajo para colectivos con problemas de empleabilidad.

¿Y si las empresas de economía social perdieran sus principios?

Los tres autores del informe presentaron después un escenario hipotético en el que las empresas de economía social “perdieran sus principios” y comenzaran a comportarse como mercantiles en aspectos como la contratación, la especialización o la localización.

Según los resultados de este ejercicio, más de 6.000 trabajadores pertenecientes a un colectivo con dificultades de acceso al empleo perderían su trabajo. De ellos, 4.578 serían personas con discapacidad, casi 350 trabajadores en riesgo de exclusión social y 796 mayores de 55 años, 328 mujeres mayores de 45 años y 631 trabajadores poco cualificados.

Además, alrededor de 5.000 trabajadores que hayan disfrutado de períodos continuados de empleo en la economía social tendrían una o más experiencias de desempleo. Casi 40.000 trabajadores verían reducido su salario. Más de 20.000 trabajadores verían ampliada su brecha salarial. Y se perderían más de 2.700 puestos de trabajo en las zonas rurales.

Estos son solo algunos ejemplos de lo que sucedería en Galicia si la economía social no sustentara determinados principios y valores. Y, aunque los beneficios de este sector no se pueden computar con asépticas cuentas anuales porque un margen tan estrecho dejaría fuera a las personas y, sin ellas, a la sociedad, lo cierto es que, además, las cifras que genera este modelo económico avalan su crecimiento sostenible.

Intervenciones del presidente de ForoEsGal y de la Ministra de Empleo e Igualdad

En su intervención de clausura del acto, el presidente del Foro por la Economía Social de Galicia, Celso Gándara, anunció la continuidad del estudio presentado, e insistió en los valores diferenciales del modelo económico que representan desde el Foro.

Gándara dio paso a la conselleira de Empleo e Igualdad, María Jesús Lorenzana, que cerró el acto avanzando que la Xunta pondrá en marcha este año nuevos programas con los que definir un sello para la economía social, apoyar la consolidación de estas empresas y asegurar la continuidad de empresas mercantiles en crisis generacional a través de su conversión en cooperativas.

Lorenzana destacó también la importante labor realizada por el ForoEsGal desde su creación, y su alianza con la Xunta de Galicia.

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