Actualidad del Observatorio Español de la Economía Social

07/01/2016

Asufin, Adabankia y 'Fundación ¿Hay Derecho?' lanzan un Decálogo para el Cambio de Cultura Bancaria

Las asociaciones de consumidores bancarios Asufin y Adabankia, la 'Fundación ¿Hay Derecho?', y los profesores universitarios Fernando Zunzunegui -promotor de la iniciativa-, Joan Ramon Sanchis y Gustavo Matías Clavero, han unido sus fuerzas para impulsar un Decálogo para el Cambio de Cultura Bancaria. En él se incluyen propuestas de gran calado que ya están aplicándose en otros países como Reino Unido y, en especial, Holanda, donde los profesionales del sector están obligados a defender los intereses del cliente, siendo su incumplimiento causa de despido. Los promotores invitan a unirse al Decálogo a las plataformas de consumidores, los partidos políticos y las entidades financieras.

“Un decálogo es una forma clásica y muy reconocible de hacer un necesario descenso a lo concreto, y éste, además, contiene propuestas muy atendibles”, subraya el notario y patrono de la 'Fundación ¿Hay Derecho?', Fernando Gomá, sobre la necesidad de impulsar este decálogo, al que ya se han unido entidades como el IUDESCOOP, de la Universitat de Valencia, ASGECO y la Unión de Cooperativas de Consumidores y Usuarios de España (UNCCUE). Fiare Banca Ética y representantes de Caixa Ontinyent y Caixa Popular están estudiando su adhesión.

Entre esas propuestas atendibles destaca, además del juramento hipocrático, la introducción de la educación financiera, la necesidad de contar con un asesor independiente y cualificado en la negociación de productos complejos, el fomento de la banca de proximidad y las formas de financiación participativa.

Al servicio de la sociedad

“El interés del cliente ha quedado en un segundo plano. Con esa cultura por muchas normas que aprobemos no resolveremos el problema de la falta de confianza. La banca debe estar al servicio de sus clientes y de la sociedad”, explica el promotor de la iniciativa y profesor universitario de Derecho del Mercado Financiero Fernando Zunzunegui. En este mismo punto insiste Joan Ramon Sanchis: “Queremos que la banca esté al servicio de las personas y no al revés y, desde una perspectiva empresarial, las inversiones financieras se dirijan a la producción y no a la especulación, destinando créditos a la economía real con el fin de generar actividad económica y empleo a través de la financiación de los autónomos y las pequeñas empresas”.

El decálogo insta a los grupos políticos a que se incluya en los colegios, institutos y Universidad la educación financiera, como reza el último punto. Adicionalmente, se propone también que la oferta de productos complejos o de alto riesgo cuente con un asesor independiente para evitar que las personas se vayan del banco sin saber qué han adquirido. “No se trata de culpabilizar al consumidor de los desastres ocurridos en los últimos años, pero de todo lo acontecido hemos de extraer una importante lección para el futuro. Hay que sustituir la confianza ciega, acrítica, que se ha tenido hasta ahora, por lo que podríamos llamar ‘confianza merecida’, y para ello, y como parte imprescindible (no única, desde luego) ha de figurar el mayor y mejor conocimiento del mundo financiero, en lo que nos afecte como ciudadanos”, recalca Gomá.

El decálogo ya se está difundiendo en redes sociales con el hashtag #CambioCulturaBancaria y hay una campaña de firmas registrada en change.org con la Asociación Española de Banca (AEB) como destinataria. Tras la publicación del decálogo, y su posterior difusión en redes sociales, el presidente de la AEB, José María Roldán, ha advertido que “en la cultura bancaria radica el éxito o el fracaso de cada una de las entidades financieras” y que se está poniendo en riesgo la propia supervivencia a medio plazo del propio sector. “Esto es un negocio basado en la confianza, si no, no funciona”, ha añadido.

El Decálogo para el Cambio de la Cultura Bancaria forma parte de un proyecto más amplio que incluirá, entre otras iniciativas, la celebración de una Jornada el próximo mes de febrero de 2016, donde consumidores, expertos, organismos públicos y representantes de las entidades financieras reflexionarán sobre este objetivo primordial para los consumidores.

Decálogo para el cambio de cultura bancaria

I. Responsabilidad social
La banca debe contribuir al progreso social y económico canalizando el ahorro hacia la inversión productiva.
II. Conflictos de interés
La banca debe actuar en interés del cliente resolviendo los conflictos en favor de los clientes.
III. Buen gobierno
La ética debe ocupar el centro del negocio bancario.
IV. Juramento hipocrático
Los profesionales de la banca deben prometer defender y no dañar el interés del cliente.
V. Asesoramiento de cabecera
La oferta de productos complejos o de alto riesgo debe contar con asesoramiento independiente y cualificado.
VI. Concentración bancaria
No deben existir bancos demasiado grandes para caer y para evitar abusos y un excesivo poder de mercado se debería de potenciar la banca de proximidad.
VII. Pluralismo institucional
La diversidad de modelos bancarios, incluyendo las cooperativas de crédito, es una riqueza que hay que preservar.
VIII. Financiación alternativa
La concurrencia entre la financiación bancaria y no bancaria debe ser leal. Se deben fomentar las plataformas de financiación participativa y otras formas de financiación alternativa.
IX. Servicios de reclamaciones
Deben existir sistemas efectivos de resolución de conflictos entre la banca y sus clientes.
X. Educación financiera
La educación financiera se debe impartir en los centros educativos al margen de la industria bancaria.

Imagen: Fernando Zunzunegui.

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